Enloqueció Ingrid
¿A Ingrid se le olvidó que la secuestraron por su culpa? ¿Por qué su ambición de poder y su terquedad fueron más poderosas que la prudencia y el instinto de conservación? ¿Ya se le olvidó que todo el que pudo le rogó que no fuera al Caguán porque no había condiciones de seguridad? ¿En serio cree que fue el Estado el que la secuestró? ¡Por Dios! Si hasta su Jefe de Prensa de la época reconoce que eso era un suicidio.
¿A Ingrid Betancourt ya se le olvidó la Operación Jaque, que ella misma calificó como la “Operación Perfecta”? ¿Ya se le olvidó que gracias a esa operación es que regresó sana y salva? ¡Increíble!
En estos días vino a Colombia dizque para celebrar los dos años de la Operación Jaque. ¡Que farsante! En realidad vino a iniciar el trámite de su demanda contra el Estado. Una demanda que el General (r), Jorge Enrique Mora calificó como “mercantilista y oportunista”
No sé qué ideas puedan estar pasando por las cabezas de Ingrid, doña Yolanda y su abogado, pero pretender culpar a Estado de su propia irresponsabilidad es un disparate. Hasta en el último retén el Gobierno y el Ejército le advirtieron que no fuera. Pero, claro ella quería ser Presidente y sabía que el vitrinazo en los medios le permitirían subir en las encuestas. Menosprecio la locura de las FARC. Ese fue su gran error.
¿Demandar al Estado porque no la rescató a tiempo? ¡Caray! ¿Es que acaso hay un tiempo ideal para ser rescatado de un secuestro? ¿ Acaso no le han contado doña Yolanda la mamá y Astrid la hermana, que el Estado no la rescató antes porque ellas no dejaron? ¿No le habrán mostrado los recortes de periódico en donde está registrada su sistemática oposición al rescate? Deberían, para que vea también que el gobierno siempre ha estado estado atento a lograr la libertad de todos los secuestrados mediante rescate, liberación unilateral o negociación. Pero una negociación seria, no una payasada mediática como la que quisieron hacer con Emanuel el hijo de Clara Rojas.
Creo que Ingrid Betancourt enloqueció. Ella, que está a punto de lanzar un libro que la hará multimillonaria y más famosa de lo que es; cuyo rescate será llevado al cine; que vive en Paris a cuerpo de rey; que tiene la vida resuelta, era la menos indicada para intentar una demanda contra el Estado. Yo hubiera entendido si el intento de demanda viniera de las familias de los soldados que llevan 11 años pudriéndose en la selva o de la madre del Mayor Guevara cuyo cadáver casi no le devuelven las FARC, pero de la todo poderosa Ingrid Betancourt y su familia no lo puedo entender. La única razón valida que encuentro es que Ingrid enloqueció.
Creo que a Ingrid, a doña Yolanda y Astrid lo que acaban de hacer les saldrá más caro que el secuestro mismo. La sociedad colombiana está indignada y con razón.
PD: ¿Qué estará pensando Clara Rojas de las pretensiones de su exmejor amiga?