18 de marzo de 2024
Hernando Arango Monedero
Un paso más
Sí! Avanza a cada día, con mayor empuje, el llamado cambio que proponen Petro y sus seguidores, los que, como ejército de independientes, cada uno por su lado, proponen cosas más disparatadas e inconsecuentes con lo que es un Estado y su organización, para que marche y cumpla con sus objetivos para con la sociedad.
El diálogo nuevo
Algo me indica que estamos ante una nueva clase de diálogos. Sí! Así es, tal y como nos lo ha dado a entender el ministro de Transporte con toda claridad. ¿Será que no es absolutamente claro para alguien que el diálogo ahora es para aceptar, sí o sí, lo que una de las partes dice o defiende?
Copiar es el objetivo
Sí; copiar es el objetivo. Y lo vemos a cada día, Y de qué manera repetimos lo que se ha venido sucediendo en Venezuela. Faltaba más que no fuera así, como quiera que el señor Petro, y algunos de sus amigos, asesoraron a Chavez en los programas de gobierno que han dado al traste con la economía venezolana, la que era la más próspera en américa latina y hoy es una ruina por excelencia.
Que creer
Bueno. ¿A quién le vamos a creer? Según parece, la estrategia del gobierno es manipular las mentes de sus ciudadanos y, para ello, se utiliza toda clase de artimañas, entre ellas, la mentira presentada como estadísticas, datos, cifras y cuanto artilugio se encuentran para sustentar los cambios que se pretenden hacer.
La gran tarea
No cabe duda que la gran tarea del actual gobierno es ponerse de acuerdo entre los que tienen algún mando y están llamados a orientar las acciones del llamado cambio, porque lo cierto es que. como van, no lograrán concretar nada que beneficie la población y, por el contrario, nos conducirán a un caos del que difícilmente podremos recuperarnos.
De rodillas
Sí! De rodillas. Así estamos los colombianos oyendo y callando ante cada idiotez que el deslenguado de nuestro presidente espeta en el diario acaecer de nuestro país.
El manipulador
Es evidente que hemos caído en las manos de un manipulador, el mismo que ahora funge como presidente, pero que se acostumbró en su largo camino a la presidencia a convertir en verdades lo que su extraviada mente da por cierto.
¡Cambio! ¡Cambio!
Todo parece indicar qué, en el Gobierno del Cambio, hay más afán por hacer que por cambiar, pues en el afán, salen cosas que a nada bueno conducirán en el mediano y largo plazo.
Allí vamos
Bueno, nada de lo que está sucediendo estaba fuera de lo que desde la campaña prometió el señor presidente. Cambio!, cambio! fue el grito de batalla y cambio, cambio estamos teniendo.