28 de marzo de 2024

Colombia le apuesta a la economía circular para llegar a nuevos mercados

11 de noviembre de 2020
11 de noviembre de 2020

Acebri es una empresa exportadora colombiana con más de 12 años en el mercado, que se dedica a la recuperación y transformación de materiales PET postconsumo, envases hechos con tereftalato de polietileno (PET por sus siglas en inglés) constituyen uno de los elementos reciclables más usados en todo el mundo.

Cada vez son más los productos envasados en este material gracias a sus cualidades: irrompible, económico, liviano, impermeable y reciclable; además, desde el punto de vista ambiental, el PET es la resina con mejores características para el reciclado, según Greenpeace.

Láminas que permiten proteger rosas de exportación, fibras que pueden reemplazar la malla electrosoldada y reforzar el concreto en construcciones, filamentos de escobas, e incluso cubetas de huevos para el sector agrícola, son algunos de los productos que la empresa ha logrado desarrollar a partir del reciclaje de diferentes objetos.

“Hemos decidido darle una segunda oportunidad al plástico o a las botellas de postconsumo, como las de agua, aceite o Pony Malta. Le damos un cierre a su ciclo de producción, las recuperamos, las transformamos y desarrollamos productos útiles para otro tipo de industrias”, aseguró Andrea Briceño, gerente comercial de Acebri.

PROCESOS DE TRANSFORMACIÓN

La compañía transforma entre 300 y 400 toneladas de productos al mes, lo que le ha permitido suplir las necesidades de diferentes sectores y conquistar los mercados internacionales.

“Desde nuestros inicios hemos exportado a diferentes países de acuerdo con sus requerimientos y sus mercados. Empezamos exportando fibra para escobas a Bolivia, Chile, Perú, República Dominicana y México. En el caso de la lámina para flores, la exportamos a Ecuador. En cuanto a la fibra de concreto hemos abierto caminos hacia Venezuela, Perú, Bolivia y Panamá. Y estamos buscando oportunidades comerciales para la cubeta de huevos, ya que es un producto relativamente nuevo”, indicó Briceño.

El proceso de transformación comienza desde el momento en que cualquier bogotano desecha una botella plástica. Estas son recogidas por la red de recicladores informales que, a su vez, llevan la carga a los centros de acopio. Una vez en el lugar, se clasifica el material y se transporta hasta la planta de producción, donde gracias a equipos de última tecnología se transforman y se obtienen los distintos productos.

CRECIMIENTO EXPORTADOR

Es así como la empresa ha dejado una huella de sostenibilidad, responsabilidad social y ambiental en su camino de internacionalización. En 2019 alcanzó los US$657.763 en exportaciones. Además, a mediados de 2020, con el apoyo de Procolombia, logró abrir un nuevo mercado, al exportar por primera vez a Paraguay.

“Algo que nos permitió ampliar nuestros mercados fue la ayuda de Procolombia. Un consejo para los exportadores es apalancarse en este tipo de entidades gubernamentales, porque a veces no es muy claro el proceso de exportación por todos los documentos o por todas las reglas que existen. Pero con el apoyo de una entidad como Procolombia todo puede ser más sencillo” concluyó. (GRS-Colombia).