29 de marzo de 2024

En redes & Enredos

12 de enero de 2020
Por Jorge Emilio Sierra Montoya
Por Jorge Emilio Sierra Montoya
12 de enero de 2020

Celebro que la pasada entrega de esta columna –En redes & Enredos– haya sido reproducida por The World News, un portal de noticias internacional, pero lamento que ahí no haya aparecido mi nombre, como si los derechos de autor se esfumaran en las redes. ¡Qué enredo!

Libros de consulta:

De nuestro ilustre colega en la Academia de la Lengua, nuevo vicerrector de la Universidad La Gran Colombia y presidente de la Academia Patriótica Antonio Nariño, Don Hernán Olano, acabo de recibir cuatro libros de su más reciente producción literaria, cuyos títulos hablan por sí solos:

  • La morada del héroe: Biografía no autorizada de Mario Vargas Llosa;
  • Los poemas de Bob Dylan y otros crímenes pasionales: Homenaje en sus 75 años al Premio Nobel de Literatura en 2016;
  • El Quijote en verso, una verdadera proeza de las letras colombianas, y
  • Dos princesas bizantinas en la corte de Aquimenzaque: Estudio sobre la Nobiliaria Colombiana, según reza el subtítulo respectivo. 

Son obras que vale la pena leer, tenerlas como textos de consulta y apreciarlas siempre por su alta calidad, que es el sello característico de su autor.

De Vargas Vila a Vargasvil:

El citado libro La morada del héroe nos trae gratas revelaciones, como ésta que va a continuación.

Vargas Vila, con Aura o las violetas, ejerció enorme influencia sobre Vargas Llosa en su niñez. ¿Cómo? Según Olano, citando un discurso del Nobel en Londres, “el niño Mario ojeaba a trozos y a escondidas” esa historia de amor que fascinaba a su abuela y su nana, quienes la consideraban “la única presentable” del entonces célebre y muy leído escritor colombiano.

Hoy, por desgracia, pocos leen a Vargas Vila, casi nadie lo recuerda y su nombre suele confundirse, cuando alguien lo menciona, con Vargasvil, el popular humorista que al parecer le ha dado por fin su anhelada inmortalidad a aquel autor romántico, cuya novela estelar llegó a competir entre nosotros con el Werther de Goethe y María de Jorge Isaacs.

Celos de la Preysler:

Otro dato de interés, traído por Olano en su Biografía no autorizada del Marqués de Vargas Llosa: su nueva esposa, la muy famosa Isabel Preysler que es toda una estrella de la farándula en España y entre sus miles de fans en América Latina (a través de Hola, como es obvio), lo perjudica en grado sumo, todo porque ella genera más interés que sus propias novelas, hasta el punto de ser causa fundamental de la reciente caída en las ventas de sus libros.

Lamentable hecho, sin duda. Pero, también debe ser una buena oportunidad para el novelista, quien tiene ahí una excelente historia para otra de sus novelas, describiendo la angustia de un octogenario escritor, con Premio Nobel de Literatura a cuestas, al que sus admiradores del mundo entero dejan de seguir por estar atentos a su mujer, la vedette que en sus últimos años se le atravesó en el camino y le robó el corazón.

¡Vaya uno a saber cómo concluirá este romance, cuyo alto rating en los distintos medios de comunicación, incluidas las redes sociales, está garantizado!

Made in Perú, pero Marqués:

¿Y qué es eso -cabe preguntar- del Marqués de Vargas Llosa? Sorpréndanse ustedes: fue el título que el rey emérito de España, Juan Carlos de Borbón, le otorgó en 2011 por decreto real, el cual le otorga el correspondiente derecho hereditario y “el tratamiento nobiliario de Ilustrísimo Señor por su contribución, mundialmente reconocida, a la literatura y a la Lengua española”.

Cabe anotar -según Olano- que ya antes el autor de La ciudad y los perros fue proclamado Duque de Miraflores por su colega Javier Marías, “quien a su vez se autoproclama Javier I, rey de Redonda” (!).

Menos mal que Álvaro Vargas Llosa, el hijo amado que también es escritor, asegura que su padre es “un republicano visceral”, según nos consta a todos sus lectores. ¿O no?

Jesús del Papa Benedicto:

Y un dato final, ya para despedirnos: La morada del héroe señala asimismo que, si bien Vargas Llosa se declara escéptico como consecuencia del liberalismo que lo caracteriza, leyó los tres volúmenes completos sobre Jesús de Nazaret, escritos por el Papa Benedicto XVI, a quien elogia “por su brillantez”, mientras lo exalta como a “uno de los grandes ensayistas europeos” (condición de la cual -agregamos- ha hecho gala en sus numerosos textos exegéticos de la Biblia y, claro, en su inolvidable Diálogo con Habermas).

“El que reza y peca, empata”, solemos decir.

De redes y enredos, ¿qué?

A estas alturas, ¿qué hay de las redes sociales, tema central de nuestra columna? No crean que nos olvidamos de ellas. Al contrario, Hernán Olano es uno de sus fieles seguidores y cibernautas, haciendo un buen uso de las mismas con sus actividades académicas, que son muchas y bastante respetables. Por nuestra parte, seguimos su ejemplo. Aquí está la prueba.

Y en cuanto a los enredos, con el de la Preysler nos basta… y sobra.

(*) Escritor y periodista. Miembro Correspondiente de la Academia Colombiana de la Lengua. [email protected]