29 de marzo de 2024

Aula virtual optimiza procesos de aprendizaje

20 de enero de 2020
20 de enero de 2020

A través de la plataforma Moodle se diseñó este escenario que promueve el pensamiento científico de los estudiantes en temas como ciclos biogeoquímicos, fotosíntesis y cadenas alimentarias.

La metodología, probada con alumnos de grado séptimo de la Institución Educativa Ciudad Boquía de Pereira, fue propuesta por la estudiante Gloria Nancy Lamprea López, de la Maestría en Enseñanza de las Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Manizales, quien explica que un aula virtual es el puente entre el proceso de enseñanza y aprendizaje de los estudiantes.

“Este modelo le ofrece al estudiante la oportunidad de seguir aprendiendo aún fuera del aula convencional, ya que puede consultar el mismo tema cuantas veces sea necesario, con ayuda de sus padres, familiares o grupo de compañeros”.

Para desarrollar la herramienta se elaboró una prueba diagnóstica de saberes a los estudiantes, con 31 preguntas determinadas por el Ministerio de Educación Nacional que incluían las categorías de: reproducción; relaciones entre sistemas; componente celular; componente biótico y abiótico; cadenas y redes tróficas; y fotosíntesis, además de preguntas de selección múltiple con única respuesta.

“Según los resultados, los temas con mayor dificultad por su bajo porcentaje de respuestas acertadas fueron cadenas alimentarias, fotosíntesis y ciclos biogeoquímicos; por eso planteamos una estrategia pedagógica diferente que incluye las tecnologías de la información y las comunicaciones”, detalla la estudiante.

Prácticas de indagación

La unidad didáctica se diseñó con cuatro temas: ciclos biogeoquímicos, fotosíntesis, cadenas alimentarias y alteraciones, cada uno con actividades de exploración o de explicitación inicial, de introducción de conceptos, procedimientos o modelización, de estructuración del conocimiento y de aplicación.

Para identificar los conocimientos previos de los estudiantes se utilizaron prácticas de indagación: “usamos como ejemplo la elaboración y observación de un terrario (objeto en el que se reproducen las condiciones ambientales de diferentes especies), acompañado de preguntas sobre su funcionamiento, como ¿por qué no necesitamos regar la planta como el resto de jardín? ¿Vemos esas pequeñas gotas en las paredes? ¿De dónde sale el agua? ¿Cómo se forman las nubes?, entre otras”, recuerda la investigadora.

Con el fin de conseguir el mejor aprendizaje las actividades se trabajaron en dos momentos: en el aula virtual y en el salón de clase. “Como algunos estudiantes carecían de internet en sus viviendas o de dispositivos electrónicos para ingresar a la plataforma, se acordó trabajar en grupos con un líder en cuya cuenta se subieron los trabajos a realizar. El aula virtual contó con diferentes actividades como videos, talleres, tareas, espacios para subir videos, análisis de temas e imágenes de exposiciones y enlaces para realizar evaluaciones”.

Test de satisfacción

Para evaluar el cambio de conceptos en los estudiantes se aplicó la misma prueba diseñada al inicio del proceso. “Así se pudo realizar un análisis en cada pregunta determinando el nivel de avance en la adquisición de nuevos aprendizajes. También se diseñó y aplicó un test para conocer el grado de satisfacción con el uso de la plataforma”, explica la estudiante.

Los resultados arrojaron que el 58 % de los estudiantes reconocieron nuevos conceptos en el tema de reproducción, con preguntas que incluyen la mitosis y sus características; en la categoría de relaciones entre sistemas, el 45,7 % identificó procesos con las estructuras que los realizan; el 81,7 % acertó las respuestas sobre componentes; los componentes bióticos y abióticos obtuvieron un 62,6 % de respuestas acertadas, y en ciclos biogeoquímicos el porcentaje fue de 31,6 %.

“Con el uso del aula virtual logramos que los estudiantes potencializaran las competencias de uso comprensivo del conocimiento científico. En este aspecto, lograron analizar el funcionamiento de los seres vivos en términos de sus estructuras y procesos, y relacionaron conocimientos adquiridos con fenómenos que se observan con frecuencia”, asegura la estudiante.

Esta investigación permite determinar que en la actualidad es necesario planear clases con actividades en las que los estudiantes sean los protagonistas de sus procesos de aprendizaje mediante actividades motivadoras que hagan del aula un lugar agradable.

“Es importante incluir las TIC en el aula. Los tiempos han cambiado y con ello las expectativas de nuestros estudiantes; estamos en el mundo de las tecnologías, que nos involucran directa e indirectamente, hoy buscamos ser sujetos activos del mundo que habitamos y las tecnologías nos facilitan el acercamiento a las personas y al conocimiento”, concluye la investigadora.

Con información de UN -Unimedios