28 de marzo de 2024

No traguemos entero

17 de abril de 2019
Por María Fernanda Restrepo Torres
Por María Fernanda Restrepo Torres
17 de abril de 2019

Hace más o menos 5 años el reconocido portal La Silla Vacía hizo un ejercicio bastante interesante durante uno de los debates televisados con los candidatos presidenciales en vísperas de las elecciones de 2014. Fue como una suerte de termómetro de la verdad en donde se tomaban frases literales que lanzaban en vivo los aspirantes al primer cargo del país y luego de un análisis se determinaba su veracidad, falsedad o la combinación de lo uno y lo otro.

Que bien hacen hoy en día los ejercicios de esta clase. Deslindados de sesgo político, los portales independientes brindan una alternativa a los canales nacionales inmersos en una determinada corriente ideológica, junto al regreso de programas como La Tele Letal (por citar un ejemplo) nos muestran la realidad independiente de los canales privados. En ambos formatos se cuestionan por igual, sin favores ni miramientos, las declaraciones de Maria Fernanda Cabal, Gustavo Petro o Claudia López.

Cada uno de ellos han sido señalados por sus declaraciones en redes sociales, donde los internautas no perdonan ninguna imprecisión. Por supuesto, son personajes ampliamente conocidos a lo largo y ancho de Colombia, líderes de opinión que con cualquier afirmación incendiaria revientan las secciones de comentarios y titulares en los medios.

Era cuestión de tiempo para que de mano de los que no tragan entero, esta suerte de chequeo escalara hacia las regiones. Eso que suelen hacer los columnistas de opinión en los medios más reconocidos (que a veces, claro está, es imposible leerlos a todos), o las denuncias que acostumbran publicar los medios cuando los candidatos no son de su corriente ideológica, se reúnen en el portal Colombiacheck.

“No coma cuento” es su eslogan. La página recoge investigaciones, especiales y chequeos a cargo de más de 100 periodistas asociados cuyo interés principal es “fomentar una plataforma digital, abierta y colaborativa en la cual se publican artículos basados en la técnica de comprobación de hechos y datos”. Colombiacheck es firmante de la Red Global de Fact-checkers, lo cual lo certifica que cumplen los principios de dicha comunidad internacional. ¿Por qué no me di cuenta antes?

Desconocía la existencia de este espacio hasta hace unos días, dando una ojeada en Twitter, un trino llamó mi atención: la llamó porque se refería a Manizales, mi tierra que tanto amo, junto a uno de sus más reconocidos logros, ciudad universitaria; en un titular acompañado de un velo rojo con una inscripción que rezaba FALSO. Abrí los ojos como si me fueran a echar gotas.

Inmediatamente ingresé a leer y se trataba de un mensaje publicado por un funcionario, a quien básicamente se le cuestionaba por adelantarse a los acontecimientos. El trino en mención aseguraba que Manizales es parte de la red de ciudades del aprendizaje de la Unesco, cuando en realidad apenas presentó la postulación y la respuesta solamente se sabrá en octubre.

Aunque no es la primera vez que se lanza una afirmación y posteriormente tener que explicar que tanta belleza no es del todo cierta, si es una de las pocas ocasiones en las que una información de interés netamente regional trasciende en un portal donde lo más chequeado está relacionado con frases de Álvaro Uribe, Iván Duque o Juan Manuel Santos, por mencionar algunos. Y por eso, que trascendiera junto a un indicador de falsedad, me generó curiosidad.

Para nadie es un secreto que en los noticieros el país se reduce a Bogotá, Cali, Medellín y Barranquilla. Eventualmente Bucaramanga, Cartagena y el Eje Cafetero. Los otros departamentos del pacífico, de la costa caribe, los llanos y las selvas no son fuente de noticia salvo por niños que mueren de desnutrición, tomas armadas, paros, corrupción, desastres naturales, bajos niveles de educación y un sinnúmero de dificultades más.

Pero eso es una muestra de que, aunque seamos secundarios para los grandes medios, no quiere decir que no haya una lupa puesta sobre la gestión. Figurar en un portal por un tema relevante para el debate público como lo es la educación nos enseña a hilar más fino, bajarle la espuma al afán de protagonismo, pues en mi opinión vale más guardar prudencia que tener que salir a decir que sí, pero no tanto.

Casi que simultáneamente con la información desmentida por Colombiacheck, Semana publicó el estudio de la Red de Ciudades Cómo Vamos que señala a la capital caldense como la mejor para estudiar, de acuerdo con el índice de ciudades universitarias. Este puesto lo ocupa por segundo año consecutivo, hecho que llena de orgullo a nuestros dirigentes y la efervescencia termina haciendo de las suyas en redes, donde hay tantos ojos atentos al detalle.

Es una tarea ardua pero absolutamente necesaria revisar afirmaciones, contrastarlas con los hechos y dar un veredicto, máxime en esta época donde están de moda las fake news, que por su fácil difusión y gracias a la costumbre que tenemos de tragar entero y dar por sentado que es cierto porque aparece en algún portal o me lo envió un contacto fiable al celular, constituyen una grave amenaza a la credibilidad de las instituciones. Un par de casos extremos ya han ocasionado hasta la muerte de los señalados.

Eso sí, no dudo ni por un momento que la ciudad ratificará en octubre la excelencia de su oferta educativa, porque reúne las condiciones para que los estudiantes foráneos se sientan como en casa y para que los propios no tengan que migrar a otros lugares, al menos cuando de recibir formación de calidad se trata. Aunque me arriesgo a que siendo nadie en la materia, esta afirmación resulte escaneada con un check de duda.