El sentenciado fue detenido el 17 de mayo de 2016, en el Cañón de Opirama, vereda Villa Rica, en Quinchía (Risaralda) y, en su momento, aceptó de manera libre y voluntaria los delitos imputados por la Fiscalía.

De acuerdo con la investigación, el 16 de abril de 2015, varios hombres armados, entre ellos alias Manotas, empezaron a visitar las fincas de la zona, amenazaron a los propietarios o cuidadores y les exigieron dinero para no atentar contra sus vidas u obligarlos a abandonar los bienes.

Las víctimas eran agricultores, ganaderos y mineros de Guática y Quinchía (Risaralda), y Anserma (Caldas). Según las evidencias recopiladas, a una de ellas le mataron un perro y a otra un novillo, como forma de presión para que cumplieran con la petición económica o abandonaran las tierras.

Alias Manotas delinquía para Orlando de Jesús Vergara, alias Simón, quien pretendía rearmar el grupo guerrillero EPL en esta región del país.