20 de abril de 2024

A otra parte

31 de julio de 2017
Por Gustavo Álvarez Gardeazábal
Por Gustavo Álvarez Gardeazábal
31 de julio de 2017
Gustavo Álvarez Gardeazábal
Desde hace muchos años,un poco más de treinta,cuando todavía  vivía Braulio Botero, el fundador del Cementerio Libre de Circasia, he dicho en entrevistas, en artículos como este y en muchas comparecencias públicas, que aspiraba a que me enterraran a la hora de la muerte en ese cementerio y, además, parado,para simbolizar mi libertad de pensamiento.

La semana pasada las directivas de la Fundación  Cementerio Libre que maneja ese otrora epicentro de la libertad, en una determinación que respeto profundamente,me informaron que mis despojos mortales no podrán reposar allí dadas las condiciones y circunstancias que yo ilusamente había declarado en pública  y en privado   que quería.

Me toca entonces buscar otra parte donde puedan reposar eternamente mis huesos. Como no soy partidario de la cremación,ni creo en la reencarnación, y como no existe en Colombia otro lugar como Circasia que simbolizara de manera más dramática lo que significó la lucha contra el poder de la Iglesia , la que no permitía que los ateos o los no católicos pudieran ser enterrados en los cementerios que ellos y solo ellos administraban, y los obligaban a ser sepultados en el muladar.Y como además he dicho una y otra vez, tal vez entrando en contradicción , que  sería capaz de halarle los pies a todos los deudos y amigos que pretendan enterrarme como si fuera un creyente,temo que se van a encartar con mis despojos.
Queda, eso si, lista y pagada la  imponente escultura que el artista Jorge Vélez Correa realizó para poner encima de mis osamentas.Ya verán si se la dejan colocar en esa otra parte  o también la vetarán para corroborar mi carácter de contestatario irredento.

@eljodario
Publicada en Diario ADN,julio 31 2017