28 de marzo de 2024

Aprobado proyecto estampilla prouniversidades públicas de Caldas y Risaralda

21 de junio de 2017
21 de junio de 2017

La iniciativa impulsada por el senador Carlos Felipe Mejía ahora será Ley de la República para apoyar la financiación de la educación superior en estos departamentos.

Carlos Felipe Mejía

Manizales, 21 de junio de 2017. La plenaria del Senado aprobó este miércoles la prórroga de la estampilla prouniverversitaria de Caldas y Risaralda.

La iniciativa del senador del Centro Democrático, Carlos Felipe Mejía, se convertirá ahora en Ley de la República y beneficiará con recursos a las universidades de Caldas, Nacional de Manizales y Tecnológica de Risaralda.

El autor de la iniciativa destacó esta aprobación que garantiza financiación de hasta 300 mil millones de pesos.

“Esta estampilla prouniversitaria le dará la posibilidad a estas universidades de los departamentos de Caldas y Risaralda para que puedan recaudar hasta 300 mil millones de pesos por departamento. Es decir, 300 mil millones en Caldas y 300 mil millones en Risaralda y hasta por 20 años”, explicó Mejía.

“Estos recursos irán a las arcas de las universidades públicas de Risaralda y de Caldas que tantas necesidades tienen por estas dificultades financieras que enfrenta la universidad pública. Enhorabuena para los estudiantes universitarios”, destacó el Senador Carlos Felipe Mejía.

El Congresista reconoció el respaldo recibido por legisladores de otras colectividades que presentaron su apoyo a esta iniciativa durante su paso por el Congreso de la República.

“Reconocer que este proyecto no solo es de mi autoría, sino que les pedí a los senadores que tienen votos, que tienen apoyo en el Eje Cafetero que me acompañarán en esta iniciativa”, destacó.

“Aquí hemos logrado algo muy importante para la educación universitaria de los departamentos de Caldas y Risaralda”, añadió Mejía.

Cabe destacar que las estampillas se han considerado como tributos en la medida en que participan de la naturaleza de las contribuciones parafiscales, pues constituyen un gravamen cuyo pago obligatorio deben realizar los usuarios de algunas operaciones o actividades que se realizan frente a organismos de carácter público.

Dichos recursos se revierten en beneficio de un sector específico y están destinados a sufragar gastos en que incurran las entidades que desarrollan o prestan un servicio público, como función propia del Estado.