19 de abril de 2024

Trabajadores y Gobierno no se ponen de acuerdo por modificación a proyecto de recargos nocturnos

26 de mayo de 2017
26 de mayo de 2017

Bogotá, 26 de mayo de 2017 (RAM) Mientras que el Gobierno respaldó el pago de recargos nocturnos a partir de las 9 de la noche, los trabajadores rechazaron la modificación que se le hizo en el Congreso al proyecto de ley que busca revivir el pago de estas horas a partir de las 8 de la noche.

Luis Alberto Vanegas, miembro del Comité Ejecutivo de la Confederación General de Trabajadores (CGT), expresó que las modificaciones que hizo la Comisión Séptima del Senado, en tercer debate, al proyecto de ley no cumplen con lo prometido por el presidente Juan Manuel Santos.

“El empresariado y el Gobierno Nacional, desde la presidencia de Álvaro Uribe, decidió negarles las horas extras a los trabajadores; lo que nosotros estamos reclamando es que las propuestas de campaña del presidente Santos se cumplan”, dijo Vanegas.

Por su parte el ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas, dijo que el cambio que se realizó al proyecto es más viable que la idea original.

“La fórmula que se adoptó de reducir la jornada laboral diurna, es decir sin recargos a las 9 de la noche (hoy estaba hasta las 10 de la noche), es mucho mejor de la que se había propuesto originalmente”, indicó el ministro.

Señaló que el cambio propuesto “logra un equilibrio entre la competitividad empresarial y la solidaridad de mejorar las condiciones de vida de los trabajadores colombianos”.

Ante esto Vanegas reclamó que el Ministerio del Trabajo había propuesto reconocer las horas extras desde las ocho de la noche, lo que representaba dos horas de pago.

“Esta es una confabulación entre los empresarios, el presidente Santos y el senador Uribe para quitarle los derechos a los trabajadores” dijo Vanegas.

La iniciativa proponía que se comenzará a cobrar horas extras a partir de las 8 de la noche. Pese a ello, las centrales obreras han tenido como una de sus banderas de lucha el que se devuelva el recargo a partir de las 6 de la tarde.

Con este proyecto se modificaría la Ley 789 de 2002 que en, su momento, determinó que la jornada laboral nocturna en Colombia empezaría a partir de las 10:00 de la noche.

Ministra del Trabajo, Griselda Janeth Restrepo Gallego, manifestó que el Gobierno va a acompañar esta iniciativa.

La ministra afirmó al respecto que, “el Gobierno va acompañar esa iniciativa, nos parece absolutamente importante que podamos avanzar en un propósito de que los trabajadores colombianos tengan esa hora de recargo nocturno, y estamos optimistas, hoy llamamos al presidente de la Comisión Séptima para que avance y para confirmar, como lo ha hecho permanentemente este Ministerio, que apoyamos esta propuesta que alcanzó consenso”.

Restrepo dijo que si bien, tanto la cartera laboral y los trabajadores tenían una aspiración mayor, “también es clave tener en cuenta el momento que atraviesa el país, el estado de la economía, la situación de los empresarios, pero somos optimistas de que con el dinamismo de la economía se puede cubrir los gastos que este esfuerzo implicará. Por eso consideramos que esta concertación que se logró en la Comisión Séptima del Senado es importante y es un significativo logro para los trabajadores”.

Como inconveniente calificó Fenalco Bogotá el proyecto de ley que avanza en el Congreso y que pretende modificar las actuales reglas sobre recargos nocturnos dentro de la jornada laboral.

De acuerdo con el dirigente del gremio, Juan Esteban Orrego, el sobrecosto que genera la sola modificación de la jornada, que comprendería el horario de 6 a.m. a 9 p.m., equivaldría al pago de salarios y prestaciones de cerca de 50.000 trabajadores de personal operativo lo que generaría un incremento en el gasto laboral de 3.4%, sin que se generen mayores ventas.

Estos sobrecostos, de acuerdo con el Dirigente Gremial, indudablemente generarían una caída en la competitividad, aumento en los precios de los bienes y desestimularía la creación de empleo.

Igualmente, los comerciantes advirtieron que el país no está en capacidad de asumir los costos económicos y sociales de una reforma laboral que traiga como resultado, sobrecostos, reubicación de empresas multinacionales a otros países, disminución de empleos existentes y un retroceso en materia de formalización laboral, especialmente en el contexto del postconflicto