28 de marzo de 2024

PENSIONES, A ASEGURAR EL FUTURO

5 de junio de 2016

El sistema pensional presenta graves problemas en materia de cobertura, equidad y sostenibilidad fiscal. Esto margina a millones de personas de una pensión. Urge la implementación de la reforma pensional.

Cuando los expertos hacen referencia a las diversas reformas estructurales que el país debe emprender para conseguir impulsar su desarrollo y asegurar mayores niveles de equidad, siempre se considera la pensional.
Más aún, hay quienes señalan, con bastante razón, que la reforma tributaria estructural debería ir de la mano del ajuste al sistema pensional colombiano.

En este sentido es claro que la presión que ejerce el gasto en pensiones en el presupuesto nacional anual está, junto con los egresos para la seguridad y la educación, entre los más altos. Los tres rubros suman casi 100 billones de pesos, lo que representa un poco menos de la mitad del Presupuesto General de la Nación.

Pero, a pesar de que, como lo indica Fedesarrollo, en años recientes el sistema pensional ha sufrido algunos ajustes “que han ayudado a mejorar la sostenibilidad financiera del sistema”, los problemas de cobertura e inequidad llevan a que los beneficiarios de los recursos del presupuesto nacional sean solo dos millones de jubilados.

Según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el sistema presenta serios problemas de equidad, pues además de que las pensiones del Régimen de Prima Media (RPM) están subsidiadas en un 70 por ciento, el 92 por ciento de estos subsidios beneficia a los grupos de mayores ingresos (quintiles 4 y 5 de la población) con un costo de 1.5 por ciento del PIB.

Esto lleva a que, en la actualidad, menos de la tercera parte de la población mayor de 60 años acceda a una pensión.
De continuar las cosas como están, el Bid calcula que en el año 2050 existirá un déficit de cobertura pensional de entre el 50 y el 80 por ciento de los adultos mayores de 65 años.

Ello implica, al igual de lo que hoy ocurre, que la mayoría de este grupo poblacional estará obligada a continuar trabajando después de la edad de jubilación o a depender económicamente de sus familias.

Frente a esta problemática, diversas entidades internacionales (como la OCDE y el BID) y nacionales (como Fedesarrollo y ANIF) han llamado la atención sobre la urgencia que existe de implementar una reforma al actual sistema pensional con el propósito de mejorar su cobertura, equidad y sostenibilidad fiscal.

Entre las diversas propuestas que se han formulado para alcanzar dicho objetivo está la que plantea Fedesarrollo de “avanzar hacia un esquema multipilar en el cual los distintos regímenes se complementen, en lugar de competir entre sí”.

Para ello se requiere imponer ciertas restricciones al uso del RPM de tal forma que se reduzcan los subsidios implícitos que este conlleva y que se controlen los incentivos que tienen ciertos cotizantes para moverse de un régimen a otro.

A su vez, el BID sugiere que se facilite y se asegure la cotización por parte de los beneficiarios, al tiempo que propone “reformar el Régimen de Ahorro Individual con Solidaridad (RAIS)”.

Finalmente, hay un consenso casi generalizado de que se deben afectar los parámetros básicos utilizados en el cálculo de la pensión. Así, se propone elevar los años de cotización, incrementar la edad de jubilación y reducir las diferencias de género al momento de jubilarse.

Para despejar el futuro pensional de millones de ciudadanos, es urgente que el Gobierno y el Congreso (que en esta materia tienen una gran deuda con el país) concreten la tan esperada y necesaria reforma pensional.

EDITORIAL/EL COLOMBIANO