28 de marzo de 2024

Ejemplo que no se puede imitar

17 de octubre de 2010

También empapelana los altos funcionarios del gobierno para que tengan que pasar una buena parte de su tiempo defendiéndose en comisiones investigativas del Congreso. Es una estrategia que ha servido para consolidar el poder de la derecha en el Congreso y para desmontar la red de seguridad social que habían construido los demócratas en décadas anteriores, promoviendo una mayor concentración de la riqueza y concediéndoles a los más ricos enormes privilegios tributarios’

Esto tampoco ha favorecido a la clase media, cuya posición relativa en esa sociedad se ha desmejorado apreciablemente desde los años 60, y ha afectado seriamente a la gente de ingreso bajo. A pesar de ello, los republicanos han logrado que la clase media y los pobres voten en contra de sus propios intereses, impulsados por nociones atávicas y equivocadas de lo que para ellos representa el “gran gobierno” y el “socialismo” de Washington, apelando a la tradición individualista de la sociedad americana.

Los nuevos ricos que no desean pagar más impuestos y no tienen sentido de su responsabilidad pública financian por debajo de cuerda a candidatos populistas de extrema derecha para desbancar a congresistas de orientación liberal o progresista por haber estado a favor de la reforma a la salud, a favor del estado de bienestar, en contra de las guerras, de los alivios tributarios o por haber colaborado con Obama.

Este noviembre la campaña contra el gobierno demócrata no solamente contiene los tradicionales elementos contra el gasto social, los “liberales”, los impuestos, y la ausencia de resultados económicos favorables, sino que ha adquirido una agresividad inusitada, alimentada por el racismo, los prejuicios y iel extremismo religioso, ideológico o nacionalista, por la rabia que les produce a los blancos de clase baja y a los ricos de provincia tener a Obama en la presidencia.

Los jóvenes educados, los profesionales, los liberales, los afroamericanos, los hispanos y esa ola de opinión, similar a la verde nuestra, de clase media ilustrada o progresista que anhelaba un cambio e hizo posible que Obama llegara a la presidencia está cometiendo el error de no acompañarlo porque no ha tenido éxito con la economía y se ha sometido a las realidades de gobernar una potencia con intereses que son ajenos a su filosofía original, lo que le ha impuesto compromisos impopulares entre sus seguidores. Dejar a Obama solo en este momento, como también lo están haciendo los políticos de su propio partido, por temor a las represarías de la derecha, es volverle a entregar el país a grandes intereses y al sectarismo..

En Colombia la polarización que se creó durante el gobierno anterior y que está latente, pero hibernando a medias dentro de la Unidad Nacional. podría dar lugar a una situación similar, particularmente en lo referente a las leyes de tierras y de reparación a las víctimas, o si Uribe vislumbra serias amenazas judiciales.

Para que esto no suceda dependemos de que los que se oponen a algunos de los proyectos progresistas del gobierno o temen decisiones del poder judicial no caigan en la tentación de paralizar el Congresos para obtener beneficios políticos mezquinos.