28 de marzo de 2024

Ridiculez, ignorancia o complot

7 de abril de 2010
7 de abril de 2010

Ridículo porque el Procurador se metió a investigar y sancionar al Contralor por un asunto de legalidad en un proceso de responsabilidad fiscal, actividad que le corresponde a la Auditoría General de la Nación, cosa que ésta hizo y no encontró irregularidad; o que corresponde al ente contencioso administrativo para evaluar si se violaron o no normas legales y constitucionales en el debido proceso. Jamás un asunto disciplinario.

Ridículo porque quien llevó el proceso en comento de responsabilidad fiscal en la Contraloría hasta producir la sanción fue la ex contralora Elsa Flórez, en 2006, no Rodrigo Osorio que se posesionó en 2008. Ridículo porque cuando se le pidió la revocatoria de dicho proceso a Osorio, este simplemente contestó que no se podía hacer porque el mismo estaba debidamente ejecutoriado, tanto que el implicado, el actual gerente de EPA Jhon Jairo Toro había pagado la sanción de $4 millones; además, porque había una condena anterior del Consejo de Estado al propio Toro por haber negado el servicio de recolección de basura a un barrio recién hecho en el proceso de reconstrucción de la ciudad en el 2002. Ridículo porque de más de 12.000 procesos que hay en el país de responsabilidad fiscal por parte de las contralorías, ninguno es objeto de investigación de la Procuraduría, sólo el de Armenia, una verdadera idiotez.

Claro que también puede ser por ignorancia, y de eso ni culpa tendrá el pobre Procurador. Ignorancia porque hay un desconocimiento absoluto de las funciones de los poderes públicos. Ignorancia porque dice que el Contralor violó la Constitución, pero no menciona qué artículo, como si hubiera violado sus 380 artículos más los parágrafos. Porque dice que el Contralor actúo en el cobro coactivo de los 4 millones al gerente de EPA, cuando esa no es una función de los contralores y, por supuesto, Osorio no lo hizo.

Que me perdone el Procurador si hasta aquí he sido altanero al llamarlo ridículo o ignorante. Porque si no fue por una de estas dos trampas que profirió el fallo de marras, entonces considero que se trata de un complot, y para ello hay muchas pruebas.

Ospina como secretario de Gobierno de Armenia protegió al ex alcalde David Barros en el contrato irregular de las cámaras de seguridad porque se abstuvo de hacer efectiva las pólizas del mismo, causando un detrimento patrimonial de más de $1.000 millones al municipio, ocultado los pecados del contrato que firmó Barros. Y para protegerlo desde la Procuraduría, Ospina ataca al Contralor. ¿Por qué? Porque el contralor Osorio le tiene una docena de juicios de responsabilidad fiscal a Barros y sus amigos, los ex gerentes de EPA: Gil, Patiño, Martínez y Sánchez; porque la Procuraduría no ha empezado ninguna investigación contra estos funcionarios a pesar de que la Contraloría ha compulsado copias para que se inicien las investigaciones de carácter disciplinario como lo manda la ley; porque a la Contraloría le están retrasando las transferencias que debe hacerle el municipio para su funcionamiento y, lo peor, porque el contralor Osorio ha recibido amenazas de muerte.

La mejor contraloría de la historia de Armenia, con resultados óptimos de sanciones a funcionarios corruptos, con certificación del Sistema de Gestión de Calidad Pública; en el 2008 pasó del último puesto entre las 25 contralorías intermedias del país, al puesto 6 en el ámbito regional; elogiada por el auditor General de la Nación como una de las mejores de Colombia. Por eso, el contralor Rodrigo Osorio es víctima de la ridiculez o la ignorancia de un Procurador, o de un complot que se teje en su contra entre delincuentes de cuello blanco en la ciudad. La Crónica del Quindío.