16 de abril de 2024

Se conmemoran 11 años del terremoto en el Eje Cafetero

24 de enero de 2010
24 de enero de 2010

Según los líderes de la reconstrucción en el Quindío, la misma Organización para las Naciones Unidas recomendó al gobierno haitiano tener en cuenta el modelo del Fondo para la Reconstrucción del Eje Cafetero –FOREC- cuando empiecen las labores de reconstrucción de Haití.

Y es que con el funcionamiento de esta Institución, creada para atender la emergencia, en menos de tres años se volvieron a poner en pie más de 125 mil viviendas, así como toda la infraestructura pública que resultó deteriorada con el sismo de aquel 25 de enero de 1999 que destruyó el 60 por ciento de la ciudad de Armenia y en menor medida a los demás municipios del Quindío y parte de Risaralda y el norte del Valle del Cauca.

Según Diego Arango Mora, miembro de la junta directiva de ese FOREC, Armenia que en su infraestructura no tiene rastros del terremoto, es garantía de que el modelo es aplicable para Haití.

“Yo estoy absolutamente convencido de que es el camino viable y lógico de atender una emergencia de la magnitud de lo que se presentó en ese país y como la que se presentó en nuestra región. Sólo habría de aplicarse un cambio y es que en Armenia, cada ONG se encargó de reconstruir completamente un sector específico de la ciudad, hacía las redes de acueducto y alcantarillado, diferente a otra ONG que hacía lo propio en otro barrio. Ahora es necesario que una ONG especializada en reconstrucción de viviendas haga todas las casas de Puerto Príncipe, mientras otra organización especializada en redes de alcantarillado hace todas las redes de esa capital, para que no haya problemas, como si hubo en el Quindío, cuando posteriormente se deben articular todas las obras”.

Según expertos, los modelos de reconstrucción podrían ser igual de exitosos porque Armenia fue reconstruida pensando en que es una ciudad sobre una falla tectónica, que en caso de generar un sismo podría ser altamente destructiva como ocurre con Haití, “por eso allí como acá, tiene que construirse con medidas más especiales que las normas nacionales o internacionales de sismo resistencia”.