29 de marzo de 2024

Armando Plata: otro histórico de la radio y la televisión

9 de septiembre de 2009
9 de septiembre de 2009

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armando plataLlegó muy joven a la radio. A los 16 años comenzó como reportero económico, en Emisoras Horizonte. A los 17 narraba carreras de galgos, en Emisoras Mil veinte.
De la mano de quien primero creyó en él, su maestro Julio Nieto Bernal, que en gloria esté, ingresó a las ligas mayores, en Caracol, convirtiéndose, en 1968, en el locutor más joven al leer el Reporter Esso, identificado como "el primero con las últimas".
Julio Enrique Sánchez Vanegas, «Cacherilas», lo internacionalizó, incluyéndolo en la nómina que trasmitió la velada final de Miss Universo y la entrega de los Premios Oscar, en 1969. El papá de Julito (el de la W) le puso de ñapa el apodo que lo ha acompañado toda su vida: «El Chupo».
Gracias a su osadía y facilidad para improvisar, fue llamado a conducir los programas de televisión "Soy Aficionado" y «Lo que veremos en Cine».
A finales de los años 60, su ídolo era Enrique Guzmán y admiraba a Los Speakers, a quienes no pudo ver en directo por falta del vil metal. Sin embargo, es consciente de que fueron ellos quienes despertaron su admiración y devoción por el sonido del rock.
No fue de la onda «a go gó», pero recuerda con cariño a su burrito «Gogó», en el que recorrió su
Chocontá natal y los sitios de mayor atracción turística de los hijos del pueblito: la represa del Sisga, los baños termales del Neme y el páramo del Choque, en el que buscó sin éxito los restos de un avión accidentado allí a finales de los 40.
Su padre, idealista y romántico, aspiraba a hacer de él un poeta y músico. Su madre siempre le aconsejó: «Debes SER ALGUIEN en la vida». (Las letras en mayúscula le dieron el título a su libro autobiográfico).
«Ser o no ser él», el eterno dilema del cervantes inglés. Con esta angustia llegó al dios Marte, ingresando al oficio de las armas y la guerra, a través de la Escuela Militar. Escuchando a Serrat fue consciente de que nunca llegaría a General y su encanto por las armas murió, como muere el dia en la noche, como terminan los grandes amores, con más pena que gloria. Dejó las instalaciones de «Blakc River», buscando su norte en la Universidad Javeriana.
 Hoy, después de casi medio siglo de haber llegado a los medios electrónicos, recuerda con cariño sus primeros pasos en la Radio y la Televisión; sus satisfacciones y descalabros. De estos últimos los que más recuerda fueron la hazaña del nadador leticiano Capax , en 1975, y el Festival de Rock de Melgar; dos reveses que le dieron experiencia.
Al «Chupo» muchos lo han clasificado como disyokey. Sin embargo, él comenzó en esta especialidad 10 años después, en 1976. En su primer decenio en la radio fue lector de noticias y maestro de ceremonias, en la Hora Philips, en los tiempos de Hebert Castro, y en la entrega de La Orquídea de Plata Philips, al lado de Jorge Antonio Vega, a quien Armando evoca como su maestro y uno de los más versátiles y mejores locutores, con su admirable capacidad de improvisación. Admite que de Vega aprendió mucho.
El primer programa lanzadiscos que Plata realizó fue « Unicornio en la noche» para Todelar, espacio que le permitió estar en contacto directo con su audiencia observando la informalidad que siempre le ha caracterizado. En este campo fue el pionero de este concepto radial que hoy aprovechan a sus anchas Julito Sánchez y Gustavo Gómez, en las ondas de Caracol.
Este primer logro en la radio musical le valió ser llamado por Todelar como director de Radio Tequendama, en reemplazo de Gonzalo Ayala. En esta frecuencia Armando armó un verdadero zafarrancho. Valiéndose de su vocación periodística le dio otro rumbo al concepto musical que identificó a Tequendama. Conociendo como conozco a Plata Camacho puedo dar fe de que él es un extraordinario comunicador y regular disjokey. Él no se identifica con ninguna tendencia musical. Cuando la respuesta es «Me gusta toda la música, esta respuesta es un sofisma de distracción».
Cabe anotar que “El Chupo” fue el precursor de la Radio de FM en la ciudad de Manizales, a través de sus enormes esfuerzos para instituir la recordada emisora Caldas Stéreo.
Cuando Plata Camacho recorre el mundo, recuerda sus primeros periplos por el entorno natal: Topaga, Morca, Chiquinquirá, lugares de peregrinaje a los que acompañaba a su padre a cumplir promesas.
Mensaje en los 60 de Plata: «Chupito»: feliz comienzo de decenio, maestro de la radio actual.