29 de marzo de 2024

Los grandes problemas que ensombrecen el futuro de Caldas

20 de febrero de 2009
20 de febrero de 2009

La nota editorial es la siguiente:

Mala hora de Caldas
El Tiempo

 

Durante más de 30 años, Caldas ha sido un clásico ejemplo de cómo una coalición política mayoritaria puede capturar una región y, desde el poder local, montar, tanto una estructura de negocios, como una maquinaria de reproducción electoral. El "gran robo a Caldas", denunciado y reporteado hace ya 25 años por la Unidad Investigativa de este diario, destapó el famoso 'roscograma' de la alianza entre el recientemente fallecido político liberal Víctor Renán Barco y el dirigente conservador Omar Yepes.

Lo alarmante es que ha pasado un cuarto de siglo y no sólo la coalición yepo-barquista está viva y coleando, sino que los escándalos de corrupción administrativa siguen azotando a esa región cafetera. Con un poderoso ingrediente adicional: la 'parapolítica'. Cuatro congresistas caldenses están hoy siendo investigados por nexos con los grupos paramilitares: la senadora Adriana Gutiérrez, del partido de 'la U'; los representantes liberales Dixon Tapasco y Emilio Enrique Ángel -quien se declaró culpable- y el representante conservador Mauricio Lizcano. Tapasco y Ángel están detenidos y la senadora Gutiérrez renunció a su curul. Además, la Corte Suprema de Justicia tiene documentos que vinculan al reemplazo de Ángel en el Capitolio, Jairo Alberto Llano, ex alcalde de Villamaría, con aportes económicos a las autodefensas.

Pero si la 'parapolítica' quebró al yepo-barquismo como no lo lograron años de investigaciones y denuncias, un reciente informe de la revista Cambio reporta que la dupla Emilio Ángel-Ferney Tapasco -padre de Dixon y señalado como posible instigador del homicidio del periodista Orlando Sierra- está en camino de convertirse en la nueva fuerza departamental.

Como si esto fuera poco, se ve hoy en día una reedición de los escándalos de corrupción denunciados en los años 80. El gerente de la Industria Licorera de Caldas, Carlos Arturo Fehó, fue acusado por la Fiscalía por irregularidades en la contratación del proceso de distribución de la empresa, junto con el concejal de Manizales José Octavio Cardona.

Y la administración pública no es el único frente donde las cosas van mal. Hace varias semanas, la Superintendencia Financiera ordenó la intervención de Integramos, una firma de intermediación financiera a cargo de los hermanos del ex alcalde de la capital caldense Luis Roberto Rivas. Para el ente de vigilancia, Integramos habría incurrido en operaciones de captación irregular de dineros por 5.000 millones de pesos.

Sin desconocer la mejora reciente que ha tenido Manizales, varias obras públicas claves no han sido concluidas. El caso más extremo es el de la Autopista del Café, cuya construcción debía durar tres años, pero lleva 11 y dista de ser terminada.

A pesar de los intentos de renovación que han tratado de romper la tenaza de siempre, todo sugiere que buena parte del relevo político regional está empleando las mismas, o quizás peores, prácticas para ampliar sus tentáculos en los gobiernos locales, perpetuarse en cargos de elección popular y resistir los embates de los entes investigadores.

Así las cosas, el próximo 17 de marzo tendrá lugar en Manizales un evento convocado para "repensar a Caldas". Ojalá ese esfuerzo dé sus frutos y logre evitar que el deterioro siga su curso. Para decirlo con claridad, la cuestión está en si los habitantes de tan pujante y rica región del país van a permitir la reencarnación de las mismas alianzas politiqueras, pero en cuerpos ajenos. La solución a la crisis caldense, en términos políticos, éticos y de dirigencia, pasa por el surgimiento de liderazgos alternativos y honestos. Y, por supuesto, por el respaldo que obtengan en las urnas.